Primero fuimos a un centro comercial, luego tomamos el metro que todo va por aire (sostenido por columnas, claro), y cuesta COP1850.00, y siempre y cuando no salgas alguna estación, puedes cambiar de metro sin cobro. Esto tambien incluye las estaciones del cablemetro.
Dentro del metro con Miguel y Lady
Bajamos del metro, y tomamos el cablemetro. Es como el teleferico de Amatitlán. Este fue construido sobre barrios pobres, con la intención de que con esto, estos barrios empezarán a tener ingresos de dinero por turismo y por trafico cerca, lo que funcionó en algunos barrios, en otrso todavia no se ha desarrollado, pero va en camino.
Este es un barrio pobre por el que pasa el cablemetro, pero en el futuro el gobierno invertirá en el barrio.
Ven, Medellín se ve anaranjado. Me parece bueno, porque le da un toque de identidad a la ciudad.
La biblioteca Espania, fue construida en un barrio pobre, utilizando la misma estrategia, con el turismo, este barrio empezó a levantarse.
Terminamos de recorrer Medellín, llegamos a las casa, y luego de almorzar, muy rico, jugamos varios juegos de mesa, domino, cartas, dados, muy entretenido, y platicamos.
Así que ya vi Medellín, maniana pienso ir a Santa Fe de Antioquia, una ciudad colonial.
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